Consisten básicamente en la aplicación de un líquido de gran fluidez sobre la superficie del material a ensayar que, por capilaridad, penetrará en las discontinuidades. Posteriormente el sobrante que resta sobre la superficie será retirado mediante un sistema de limpieza adecuado y la aplicación posterior de un revelador será capaz de volver a extraer el líquido que antes quedó atrapado en las discontinuidades, mostrando la localización de las mismas.
Ventajas de estos ensayos:
- Resultados inmediatos muy seguros.
- No están limitados a materiales ferromagnéticos como los ensayos de Partículas Magnéticas.
- Método simple, facilitando su realización en campo.
- Se pueden aplicar tanto a muestras de gran tamaño como de pequeño tamaño.
- No son necesarios equipos especiales.