La radiografía industrial sirve para identificar si los componentes mecánicos, soldadura u otro tipo de material tienen algún tipo de daño interno.
La técnica se basa en los haces que emergen del objeto una vez que ha sido atravesado. La radiación que entra en el objeto no es la misma que sale, se produce una variación en función de la consistencia interna del objeto y de las discontinuidades internas que presenta.
Este tipo de ensayo no destructivo consiste en atravesar el componente con haces de radiación electromagnética ionizante emitidos por equipos de rayos X o por isotopos radiactivos artificiales, estos haces impresionan o bien una película radiográfica o un captador digital. La imagen generada posteriormente se estudia para determinar si un componente es apto para el uso para el que ha sido diseñado. Para poder identificar las discontinuidades de forma correcta es importante tener en cuenta variables como el espesor de la pieza, el tipo de película elegida o la fuente de emisión utilizada.
Algunas ventajas:
- Aporta un documento
- Aplicable a cualquier material
- Muy sensible a discontinuidades tridimensionales
- Numerosas técnicas especiales